El sol es una fuente de vida, pero también puede ser un enemigo para nuestra piel si no tomamos las precauciones necesarias. La exposición excesiva al sol puede causar quemaduras solares, que son lesiones inflamatorias de la piel que pueden tener consecuencias graves para nuestra salud. En este artículo te explico qué son las quemaduras solares, cómo prevenirlas y qué beneficios tiene usar protectores solares.
Las quemaduras solares son una reacción inflamatoria de la piel causada por una exposición excesiva a la radiación ultravioleta del sol. Pueden provocar dolor, enrojecimiento, ampollas, fiebre y hasta cáncer de piel si se repiten con frecuencia. Por eso, es muy importante usar protectores solares adecuados para cada tipo de piel y evitar las horas de mayor intensidad solar.
Los protectores solares son productos que contienen sustancias que absorben, reflejan o dispersan la radiación solar, evitando que llegue a la piel. Existen diferentes tipos de protectores solares según su forma de aplicación (cremas, sprays, geles, su factor de protección solar (FPS) que indica el nivel de protección frente a los rayos UVB, y su espectro de protección que puede ser amplio (contra los rayos UVA y UVB) o estrecho (solo contra los rayos UVB) y contra los rayos infrarrojos
Para elegir el protector solar más adecuado, hay que tener en cuenta el tipo de piel (seca, grasa, sensible, etc.), el color de la piel (más claro o más oscuro), el lugar y la época del año donde se va a exponer al sol, y el tiempo que se va a estar al sol. Como regla general, se recomienda usar un protector solar con un FPS de al menos 30 y un espectro de protección amplio, aplicarlo media hora antes de salir al sol y reaplicarlo en la playa, pileta o lugares dónde la exposición solar sea importante; cada dos horas o después de bañarse o sudar también.
Usar protector solar no solo previene las quemaduras solares, sino que también ayuda a mantener la piel hidratada, a prevenir el envejecimiento prematuro y las manchas solares, y a reducir el riesgo de cáncer de piel. Por eso, es imprescindible incorporar el uso del protector solar como un hábito diario de cuidado personal, no solo en verano sino durante todo el año.
La piel es el órgano más grande que tenemos; por lo tanto cuidemos de ella, no solamente en el verano, si no durante todo el año

Comments